La Cumbre del G20 se organizó en Seúl entre el 11 y el 12 de noviembre bajo el lema “Crecimiento compartido más allá de la crisis”. El evento guardó un especial significado al tener lugar por primera vez en su historia en un país emergente.

En medio de preocupaciones sobre que la entonces suscitada “guerra de divisas” podría opacar el resto de los tópicos de la agenda, Corea del Sur cumplió exitosamente su rol de presidente y coordinador de la conferencia.

Así, la Cumbre del G20 abordó diversos temas desde el tipo de cambio, el crecimiento equilibrado y el desarrollo hasta la liberalización comercial, la reforma de instituciones financieras internacionales, la red global de seguridad financiera y la lucha contra la corrupción.

Corea del Sur mostró una alta capacidad organizativa a lo largo de todo el evento y el éxito de éste le permitió mejorar su estatus internacional.

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