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La economía surcoreana creció en el segundo trimestre de 2018, al aumentar el producto interior bruto un 0,6% respecto a los tres meses anteriores. Sin embargo, el ingreso nacional disminuyó un 1%, siendo este fenómeno percibido como un indicador de una posible ralentización de los motores del crecimiento del país. Aquí es importante subrayar que “producto interior bruto” e “ingreso nacional”, si bien son conceptos que suelen confundirse, son diferentes. El producto interior bruto hace referencia a los ingresos provenientes de la producción, es decir la generación de bienes y servicios. En cambio, el ingreso nacional, además, comprende los ingresos por concepto de dividendos, intereses, rentas de la propiedad, cánones y transferencias que no necesariamente provienen de un proceso productivo. Además, abarca transacciones realizadas no solo dentro del país, sino también en el exterior. 

Aclarado esto, entre abril y junio de 2018, el PIB real de Corea del Sur disfrutó de un incremento intertrimestral del 0,6%, al superar 397,9 billones de wones. No obstante, ello supuso una reducción del margen de aumento, ya que entre enero y marzo el producto interior bruto creció un 1%. La principal causa fue el consumo privado que mostró el menor aumento desde el último trimestre de 2016 debido a que ya en los tres primeros meses del año disfrutó de un importante incremento por efecto de los Juegos Olímpicos de Invierno de PyeongChang 2018, así como a la merma del consumo de los surcoreanos en el exterior. 

El ingreso nacional, por su parte, retrocedió por primera vez en medio año. La disminución se atribuye priomordialmente al encarecimiento del petróleo y el subsiguiente empeoramiento de los términos del comercio exterior. Aún así, los pronósticos vaticinan que Corea del Sur logrará en 2018 una renta per cápita de 30.000 dólares, gracias a que el ingreso nacional nominal creció durante la primera mitad del año un 3,4% y también a la apreciación del won respecto respecto al mismo periodo de 2017. 

Sin embargo, en lo que a crecimiento económico general se refiere, la previsión del Banco de Corea es que el país podría no lograr el pronóstico inicial que auguraba un crecimiento del 2,9% en 2018 de la economía surcoreana, ya que para lograrlo debería anotar tanto en el tercer como en el cuartro trimestre un crecimiento superior al 0,9%. Definitivamente no es una buena noticia, máxime porque eleva las posibilidades de que el banco central revise a la baja la previsión de crecimiento para este año y hace más difícil esperar una subida del tipo de referencia en octubre.