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La reserva de divisas de Corea del Sur volvió a aumentar en septiembre tras un mes de descenso y registró un nuevo récord al totalizar 403.000 millones de dólares; mientras que la famosa agencia de análisis de riesgo Standard & Poor’s decidió mantener la calificación crediticia del país en el grado ‘AA’.

Sobre la reserva de divisas, el Banco de Corea dio a conocer que creció 1.870 millones de dólares entre agosto y septiembre. El ascenso se debe principalmente a dos factores. El primero es el aumento de los beneficios derivados del manejo de los activos en moneda extranjera, entre los que títulos como bonos estatales y valores respaldados por activos representan la mayoría. Éstos aumentaron en septiembre 2.790 millones de dólares para alcanzar 375.630 millones de dólares. En cambio, los depósitos en el banco central disminuyeron unos 900 millones de dólares, al tiempo que las tenencias de derechos especiales de giro del Fondo Monetario Internacional descendieron unos 20 millones de dólares. Otro factor que permitió el crecimiento de la reserva de divisas fue la emisión exitosa de bonos de estabilización cambiaria en moneda estadounidense -por el valor de 1.000 millones de dólares- siendo esto un efectivo barómetro de la solidez de la economía surcoreana.

La estabilidad de la economía de Corea del Sur se nota a la vez en su rating crediticio, en concreto el concedido por Standard & Poor’s. Esta agencia anunció que no cambiará la evaluación sobre la credibilidad de Corea y que la mantendrá en el nivel ‘AA’ en el que la situó en agosto de 2016. Asimismo dejó en ‘estable’ la previsión crediticia sobre la economía surcoreana.

Actualmente son 16 las naciones que disfrutan de notas crediticias más altas que la de Corea del Sur. De ellas, once están en el grado ‘AAA’, el mejor en la escala de calificación de Standard & Poor’s, y cinco en ‘AA+’, el segundo más elevado de ese sistema; mientras que son seis los países que empatan con Corea en cuanto a evaluación crediticia.

Es importante destacar que los factores antes mencionados -desde la exitosa emisión de bonos de estabilización cambiaria en dólares y el aumento de la reserva de divisas, hasta la no alteración de la calificación crediticia- demuestran objetivamente la buena salud de la economía de Corea del Sur. Sin embargo, también es cierto que mantener en nivel ‘estable’ la previsión crediticia sobre Corea, implica que si bien Standard & Poor’s no la empeorará, tampoco piensa mejorarla en la próxima evaluación, pues considera que sigue latente el riesgo de las amenazas procedentes de Corea del Norte contra la seguridad regional, y eso obligaría a rebajar el rating crediticio. En todo caso, pronostica que el riesgo geopolítico podría atenuarse si la economía norcoreana mejora.