Director: Bong Joon Ho

Castt: Tilda Swinton, Paul Dano, An Seo Hyeon

Genre: Drama-Aventura

Running_Time: 120 minutos

120 minutos

Homepage: https://www.netflix.com/title/80091936?locale=ko-KR

Argumento

Para Mija, una niña que nació y creció en un pueblo remoto en el monte, el cerdo Okja es su mejor amigo. Juntos viven pacíficamente y a ninguno de los dos parece incomodar el hecho de que Okja no es un cerdo común y corriente, sino uno de los supercerdos que la empresa multinacional Mirando distribuyó a 26 granjas del mundo para que fueran criados allí hace 10 años, como a modo de publicidad a favor de su Proyecto Supercerdo. El problema surge cuando esta empresa empieza a recoger a esos animales y Okja es separado forzosamente de Mija para ser llevado a Nueva York. Entonces, la niña emprende un viaje a la Gran Manzana, pese a la desaprobación de su abuelo -su única familia-, para rescatar a su amigo. Pero, en esta aventura se enfrenta, no solo a la multinacional Mirando que quiere comercializar los supercerdos usando a Okja como medio publicitario, sino también a un biólogo que desea obtener la fama también explotando a ese cerdo y a la organización de protección animal ALF, con intenciones de aprovecharse de Okja para llevar a cabo una operación secreta. ¿Podrá Mija regresar a casa con su Okja pese a estos impedimentos?

Comentario

La última película de Bong Joon Ho, Okja, ya está en cartelera y en Netflix entre mucha polémica. Al margen de la controversia suscitada a partir de esta obra sobre cómo categorizar producciones realizadas exclusivamente para ser distribuídas por plataformas online de videstreaming, son muchos los temas de reflexión que plantea. Dentro de la filmografía de Bong Joon Ho, si Snowpiercer es el ambicioso y árido resultado de una razón fría y deprimente, Okja es el sencillo y fresco producto de una sensibilidad cálida y alegre. O también podría decirse que mientras Madre es una obra que disecciona el oscuro pantano de la existencia humana, Okja es una que reflota aún tras ver y mostrar con total transparencia el fondo más sucio de este mundo. El descenlace de Okja es cruelmente triste. Sin embargo y pese a ello, este cuento extraño está lleno de luz -una luz que con nada puede ser tapado-, además de tener una flotabilidad que no puede ser reprimida.

Cuando se estrenó Madre o Snowpiercer, quienes conocen el cine de Bong Joon Ho se extrañaron al no guardar dichas películas mucha relación o similitudes con el resto de las producciones de la filmografía de este director. Dicho esto, Okja es una obra que sintoniza mucho más con los trabajos anteriores de Bong Joon Ho, tales como El perro de Flandes -cuyo argumento se centra en la persecución que hace una joven para atrapar a un ladrón de perros- o The Host que, pese al serio tema que trata, contiene escenas de comedia circense como aquélla en la que una criatura gigante que parece no tener alma, se cae y empieza a rodar en una cuesta; u otra escena en la que una muchacha sale de la boca de esa criatura. En realidad, una escena similar a esta última la hay también en Okja. La diferencia es que en The Host, la muchacha sale muerta de la boca de la criatura, mientras que en Okja la niña sale como si nada de la boca del animal tras limpiarle los dientes.

La impresión que uno tiene a estas alturas de Okja es que es la síntesis del mundo creativo de Bong Joon Ho, que destaca entre otros elementos los siguientes: uno, la solidaridad que se entabla en un contexto marcado por el mal funcionamiento de un sistema corrupto o situaciones inhumanas entre un ser débil y otro más débil todavía, y dos, la discrepante unión entre la parte inicial y central de la película en la que tanto los episodios como la actuación de los protagonistas son alegóricos y de fantasía, y la parte final en la que un mensaje de crítica real y escalofriante reina las escenas.

Mija logra al final rescatar a Okja. Incluso rescata a un cochinillo de las garras de la multinacional Mirando. Así parece finalizar exitosamente su aventura. Sin embargo, al rato se da cuenta impotentemente que su acción -aunque muy noble- no podrá cambiar el mundo, al recordar a los muchos “okjas” que vio y de los que escuchó al abandonar el imperio Mirando. ¿Acaso servirá en algo salvar a un cochinillo, que por pura casualidad se topó con Mija, mientras sistemas como el establecido por la multinacional Mirando siguen operando entre matanzas que bien hacen pensar en el holocausto? La película concluye que la acción de Mija es insuficiente. Pero a la vez enfatiza que la niña, al final de su aventura, aprendió lo que es la piedad y la solidaridad hacia todo ser vivo y Okja que siempre recibió cuidado ajeno, ahora se encargará de cuidar a otro ser: el cochinillo rescatado de la empresa Mirando. Es que en el mundo de Bong Joon Ho, la esperanza nunca fue una antorcha llameante, sino las ascuas de las que en el momento menos esperado puede volver a empezar el fuego.