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Algunas celebridades coreanas se han visto envueltas en escándalos por deudas pendientes de sus familiares. Todo comenzó con el caso del rapero Microdot, pero parece que eso ha hecho saltar casos similares, y los acreedores han declarado uno tras otro que esperan cobrar esas viejas deudas de familiares de artistas de televisión o cine, alegando que sus familiares tienen mucho dinero. Pero con esta “versión financiera” del movimiento Me-Too, los famosos alegan sufrir un fuerte perjuicio, pues los escándalos no solo dañan su imagen, sino que revelan historias familiares que nunca hubieran dado a conocer al público, además de existir casos totalmente infundados. Por ejemplo, una persona declaró a los medios haber prestado unos 270 mil dólares al padre de una actriz famosa hace 14 años. Pero sus padres se divorciaron hace mucho y desde entonces el padre no ha mantenido contacto alguno con el resto de la familia. Así las cosas, algunos de esos acreedores son realmente víctimas, pero en otros casos, ese parentesco convierte en víctimas involuntarias a las estrellas relacionadas con familiares morosos.