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Con motivo del trigésimo aniversario del establecimiento de lazos diplomáticos, Corea del Sur y ASEAN, la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático, celebraron esta semana una cumbre especial en la ciudad de Busan. La reunión culminó con la adopción de un comunicado de prensa conjunto con tres metas específicas: estrechar la relación de socios, intensificar la cooperación priorizando el bienestar de la gente y promover la paz.

En particular, los líderes reafirmaron su compromiso con el libre comercio, en contra de la corriente de proteccionismo que gana terreno en algunas naciones del mundo hoy en día, destacando como importantes hitos el establecimiento del texto de la Asociación Económica Integral Regional (RCEP) y la satisfactoria aplicación del TLC Corea-ASEAN. Asimismo, acordaron aprovechar al máximo los mecanismos de diálogo multilateral existentes, como el Foro Regional de ASEAN, para materializar la visión de una gran comunidad de paz, contribuyendo a la estabilidad tanto de la península coreana como de toda Asia.

La cumbre especial fue un hito culminante en la intensa actividad diplomática que viene desplegando el presidente Moon Jae In para estrechar relaciones con la ASEAN, considerada el bloque económico de mayor crecimiento en estos momentos y el segundo socio comercial de Corea del Sur, después de China.

En este mismo sentido, también atrajo gran interés otra cumbre que el mandatario surcoreano mantuvo inmediatamente después de la reunión con los líderes de la ASEAN: la primera cumbre de Corea con los países del Mekong, que resultó en la Declaración Corea-Mekong con medidas de cooperación a futuro.

La declaración propone dos grandes objetivos: cooperar para instaurar la paz de la península coreana y compartir experiencias sobre desarrollo económico. En detalle, define siete ámbitos prioritarios de cooperación, como son cultura y turismo, recursos humanos, desarrollo rural y agrícola, infraestructuras, tecnologías de la información y la comunicación, seguridad y medio ambiente.

Cabe resaltar que el río Mekong, que atraviesa Myanmar y la península Indochina, es para los habitantes de esa zona una importante fuente de vida y trabajo, mientras que el área del Mekong guarda un enorme valor estratégico al conectar el noreste asiático con Asia Meridional. Además, posee abundantes bienes que abarcan desde petróleo y gas natural, hasta madera, minerales y recursos hídricos. Es también una región cuya economía crece rápidamente y los datos lo demuestran, pues los cinco Estados ribereños del Mekong lograron en 2018 un crecimiento promedio superior al 6%. Por esa razón el Gobierno de Moon Jae In busca estrechar la cooperación y agilizar los intercambios con esas naciones, que a su vez son integrantes de la ASEAN, al igual que con el resto de los estados-miembro de ese bloque regional, en el marco de la llamada Nueva Política del Sur. Durante la cumbre, los países del Mekong expresaron su activo apoyo a esa estrategia de Seúl, considerando sobre todo que la experiencia de desarrollo económico de Corea del Sur puede serles de gran utilidad.

Asimismo, estas naciones se comprometieron a apoyar la iniciativa del Gobierno surcoreano por lograr la desnuclearización y arraigar una paz perpetua en la península coreana.