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Durante el invierno, en Corea es frecuente ver puestos callejeros que venden patatas dulces asadas. Por eso muchos creen que la temporada de cosecha de este tubérculo es el invierno, pero no lo es. Las batatas se cosechan entre agosto y octubre, si bien es posible encontrar as en los supermercados durante todo el año.

Las batatas son conocidas como buen aliado para aquellos que intentan perder peso, ya que cuentan con un excelente sabor y son bajas en calorías. Así, 100 gramos de este tubérculo poseen solo 128 calorías, casi el doble que las patatas, pero su índice glucémico, factor que mide la rapidez con la que un alimento puede elevar el nivel de azúcar es de 55, muy inferior al 99 de las patatas. Además, al poseer abundante fibra ayudan a transmitir sensación de saciedad rápidamente.

Por sus propiedades nutricionales y su capacidad de sobrevivir en los terrenos no muy fértiles, las batatas son consideradas hoy día como uno de los alimentos que ayudarán a combatir la crisis alimentaria global a futuro. Dicho tubérculo contiene gran cantidad de vitamina A, que ayuda a ralentizar el envejecimiento, mejorar la salud ocular y reforzar la inmunidad, así como de vitamina C, necesaria para el crecimiento y reparación de tejidos del cuerpo. Además son ricas en potasio, que ayuda a controlar la presión arterial y el sistema nervioso, y su alto nivel de magnesio ayuda a regular la función muscular y los niveles de azúcar en sangre.

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Hoy les presentamos una receta súper fácil para disfrutar de batatas: ensalada de patata dulce al estilo coreano. Los ingredientes necesarios son: unos 200 gramos de patatas dulces, uvas pasas, almendras, maíz en conserva, mayonesa y miel.

Primero, hay que lavar bien las batatas. Colocamos una olla a hervir con agua y patatas dulces, y cuando alcance el punto de ebullición, bajamos el fuego y dejamos cocer durante 20 o 30 minutos más, hasta que estén completamente blandas. Escurrimos el agua y procedemos a pelarlas. Luego, las trituramos con ayuda de una batidora de mano o con una cuchara. Añadimos algunas uvas pasas, almendras cortadas, una cuchara de mayonesa, y otra de miel o jarabe de maple, según el gusto. Si quieren una textura más suave, pueden agregar dos cucharas de leche.

¡Y ya está! Lo servimos y... ¡a disfrutar!