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El 2019 fue un mal año para el comercio exterior de Corea por múltiples factores, como la guerra comercial entre Washington y Beijing, la debilidad del sector de semiconductores y las restricciones de Japón a la exportación a Corea. Los envíos al extranjero sufrieron una caída del 10,2% respecto a 2018, el peor dato desde la crisis monetaria de finales de los noventa. Sin embargo, el saldo de la balanza comercial mantuvo superávit, reflejando que las exportaciones siguen superando a las importaciones. Además, las exportaciones cayeron en noviembre por duodécimo mes consecutivo, registrando el más prolongado descenso de la historia, después de la racha negativa de 19 meses mantenida entre enero de 2015 y julio de 2016. La debilidad en las exportaciones deriva sobre todo del abaratamiento de los semiconductores y el impacto de la guerra comercial entre Estados Unidos y China, dos naciones de las que Corea es sumamente dependiente en el plano comercial. 

Pese al continuo retroceso de los envíos al exterior, se prevé que el volumen de comercio anual volverá a superar el billón de dólares por tercer año consecutivo. Las exportaciones de Corea del Sur ascendieron a 496.900 millones de dólares en los primeros once meses del año, mientras que las importaciones sumaron 459.600 millones de dólares, generando un total de 956.500 millones de dólares, y se espera que supere el billón de dólares al acabar el año. La coyuntura económica de 2019 vino marcada por la incertidumbre y los riesgos derivados de la ralentización global, la disputa comercial entre Estados Unidos y China, el Brexit sin acuerdo y las tensiones comerciales entre Seúl y Tokio, entre otros factores. Pero Corea ha logrado superar esos obstáculos, y mantenerse como uno de los principales países exportadores del mundo. Además, los envíos de bienes y servicios al Sudeste Asiático aumentaron notablemente, llegando a superar el 20% del total de las exportaciones del país, dejando entrever un repunte de ventas al exterior. La Asociación Coreana de Comercio Internacional (KITA) ve con optimismo el panorama comercial del país para 2020, al pronosticar que el volumen de exportaciones alcanzará 561.000 millones de dólares, un 3,3% más que en 2019. En tanto, estima que las importaciones llegarán a los 522.000 millones de dólares, logrando un incremento interanual de un 3,2% para sumar un total de 1 billón 83.000 millones de dólares. La mayor demanda de equipos relacionados con la quinta generación de tecnologías móviles, la subida de los precios de los semiconductores, la diversificación de los destinos de exportación y el auge de las nuevas industrias, contribuirán a mejorar las exportaciones el próximo año, según la entidad coreana.