Menú principal Ver contenido
Go Top

Cultura

‘Tres viudas una tarde de primavera’, de Jeong Ji Ah

2019-07-30

ⓒ Getty Images Bank

Allí venía Haruko a lo lejos, con la cabeza como colgando y arrastrando mucho las piernas.

-¡Haruko! ¿Por qué te has tardado tanto?

-Fue por el desayuno de mi marido. No quería tomar nada porque no tenía hambre, así que tuve que convencerle de que comiera algo.

El marido de Haruko había muerto hace dos años, más o menos por esa época. Sabía que seguía preparándole la comida todos los días como antes, pero nunca le había hablado de él como si estuviera vivo como hoy. Había llegado lo que temía.

-Haruko, vamos a ver Sadako.

-¿Sadako?

-Sí, Sadako, nuestra amiga de la infancia.

Las tres habían ido juntas a la única escuela primaria que había en el pueblo. Y como entonces se conocieron por sus nombres japoneses, se acostumbraron a llamarse así y así seguían haciéndolo hasta la fecha.

-Yo no conozco a nadie con ese nombre –dijo Haruko.

Eso era imposible, pues Haruko y Sadako habían estado siempre muy unidas. Es más, sabía bien que ambas se veían a menudo a solas, dejándola aparte, y eso la había sacado de quicio cientos de veces.

-Sadako... Sadako... –murmuraba Haruko como intentando recordar. 

Al final concluyó diciendo: No la conozco.

-¿Qué dices? ¿Cómo que no conoces a Sadako? –gritó Eiko de la rabia que sintió al oírla.


저만치 하루꼬가 목을 축 늘어뜨린 채 흐느적흐느적 걸어오고 있다.

“하루꼬! 왜 이렇게 늦었어?”

“응, 영감 아침상이 늦어서. 배가 안 고프다고 거르겠다잖아

 그래 기어이 한 숟갈 먹이느라 늦었지“ 

하루꼬의 영감은 2년 전 이맘 때 세상을 떴다.

남편이 죽은 뒤에도 하루꼬는 하루도 거르지 않고 남편상을 봤다.

그랬어도 살아 있는 남편 밥상을 챙겼노라고 한 적은 한 번도 없었다.

아무래도 하루꼬가 이상하다. 

“하루꼬, 사다꼬네 가자” 

“사다꼬?” 

“그래, 사다꼬. 우리 동창 사다꼬” 

그녀들은 읍내에 하나밖에 없던 보통학교 동창이다.

어려서 만나 일본 이름으로 부르기 시작한 탓에 아직도 일본이름이 더 친숙하다.

“나 그런 사람 몰라” 

사다꼬를 모르다니, 그럴 리가 없다.하루꼬와 사다꼬는 단짝이었다.

“모르긴 왜 몰라! 사다꼬를”

울컥 속이 상해서 그녀는 버럭 소리를 질렀다.



Entrevista con la crítico literaria Jeon So Yeong:

Como indican sus nombres japoneses, las tres viudas vivieron uno de los períodos más turbulentos de la historia de Corea. Activistas e ideólogos, como los maridos de estas mujeres, fueron los que aparentemente lideraron aquella época, pero el relato muestra que la verdadera fuerza que hizo avanzar la historia fueron las mujeres. Intenta en cierto modo recuperar la historia de la sororidad o hermandad femenina, tan fuerte o importante como la historia de la fraternidad masculina, aunque esta última es la única que se da a conocer.



El sol de primavera colmaba las paredes de cemento del aparcamiento del edificio. ¿Cuántos años más viviría? No había ninguna certeza de que mañana siguiera viva, pero pensaba disfrutar de la vida mientras pudiera. 

Se le descamaba la piel seca, pero tenía al viejo Kim que la cortejaba. No estaría mal morir durmiendo con la cabeza apoyada en su brazo. Eiko caminó hacia los rayos del sol impulsándose con enérgico movimiento.


시멘트로 포장된 빌라 주차장에 거칠 데 없는 봄볕이 가득하다.

앞으로 몇 년을 더 살까?

내일을 장담할 수 없는 나이이긴 하지만

그녀는 살아있는 한 재미있게 살 작정이다.

살비듬 부스스 떨어지는 노파지만

치근대는 대서소 김영감도 있다.

김영감 팔베게를 베고 자다 죽는 것도 나쁘지 않겠다.

그녀는 봄 볕 속으로 네 활개를 치며 걸음을 옮긴다.




Autora:

Jeong Ji Ah nació en 1965 en Gurye, provincia de Jeolla del Sur. Escribió la novela La hija del partisano. Ganó el premio literario Lee Hyo Seok en 2006 y el de Yi Sang en 2009 por ‘Tres viudas una tarde de primavera’, entre otros.

Contenidos recomendados

Close

Nuestra página web usa cookies y otras tecnologías de recopilación de datos para optimizar los servicios. Se sobreeentiende que, al mantener el acceso, el usuario da su consentimiento tanto a nuestra Política de privacidad, como al uso de esas tecnologías. Ver más >