Los ritos chamánicos reciben el nombre de “gut”, pero la gente mayor de antaño utilizaba el término de manera figurada para referirse a cualquier espectáculo interesante, de modo que decían “esto es gut” para decir que algo era digno de verse, o “voy a ver un gut” para decir que iban a ver algo divertido e interesante. No es de extrañar que utilizaran de este modo el término, pues en aquellos tiempos en que no existía la televisión ni había otras formas de entretenimiento, un rito chamánico debía ser realmente un gran espectáculo. Hubo un tiempo en que se trataron de erradir los ritos chamánicos por considerarlos supersticiones y supercherías, pero hoy existe el consenso de que son un rico reservorio de artes tradicionales. Hoy conoceremos la música que se toca en esos ritos chamánicos o gut. El primero será el Ssitgimgut de la isla Jindo. El Ssitgimgut se ejecutaba a la muerte de alguien para purificar el alma del difunto de cualquier sentimiento negativo y asegurarle un tranquilo viaje al otro mundo. Del largo gut, escucharemos la parte en que el chamán recibe a Jeseok, que es la divinidad chamánica que determina la longevidad, la fortuna y la progenie de los seres humanos. 

“Ssitgimgut de Jindo” (recepción de Jeseok) – Kim Dae Rye y otros 

Ahora les presentaremos el Chilmeoridanggut de la isla Jeju, que fue declarado en 2009 como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. En la isla de Jeju, todas las aldeas tenían un santuario dedicado a la divinidad protectora del lugar. El santuario de la aldea Geonipdong se llamaba Chilmeoridang. Todos los años en el mes de febrero lunar realizaban un rito chamánico para venerar a Yeongdeungsin, que es la divinidad del viento. Es comprensible que le dieran tanta importancia a este elemento de la naturaleza, pues, dado que los isleños habitaban en la costa y vivían del mar, dependía del viento que pudieran salir a pescar. La mayoría de los guts o ritos chamánicos tienen una parte que se llama “bonpuri”, en la que se cuenta cómo nació, vivió y se convirtió en dios el espíritu que se venera. Hoy escucharemos el bonpuri de Cheonjiwang, el dios del cielo y la tierra, que es básicamente un mito cosmogónico que explica cómo surgió el mundo. A grandes rasgos, la historia cuenta que Cheonjiwang bajó a la Tierra, se casó con una mujer y tuvo dos mellizos, quienes se convirtieron respectivamente en los dioses de este y el otro mundo. Los dejo entonces con el bonpuri de Cheonjiwang del rito Chilmoridanggut de Jeju dedicado al dios del viento Yeongdeungsin. 

“Chilmeoridanggut de Jeju” (bonpuri de Cheonjiwang) – Kim Yun Su 

Ahora conoceremos el Byeolsingut de la Costa Este. Es un rito chamánico que se lleva a cabo cada dos o tres años en los pueblos de toda la costa oriental de la península coreana, desde Goseong en Gangwondo hasta Busan. Estos ritos, que se realizaban en los santuarios dedicados a los dioses protectores de las aldeas, tenían la característica de ser verdaderas fiestas populares, por lo que incluían todo tipo de juegos tradicionales. La música chamánica que tocaban en los ritos se ejecutaba con una gran variedad de instrumentos de percusión, lo que contribuyó a diversificar y desarrollar los ritmos musicales locales. Hoy escucharemos el gut de Sim Cheong, que forma parte del Byeolsingut de la Costa Este. Tal vez conozcan a Sim Cheong por el pansori del mismo nombre. En el rito chamánico, se cuenta la misma historia de la buena hija que se vendió como presa de sacrificio a un barco para devolverle la vista a su padre. Como se puede apreciar, consideraban a Sim Cheong como a una divinidad, pues había sido capaz de calmar las olas del mar y de devolverle la vista a su padre. 

“Byeolsingut de la Costa Este” (Simcheonggut) - Kim Yeong Suk