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La crisis de COVID-19 no parece remitir y de hecho, la situación actual anticipa un futuro próximo aún más sombrío, mientras a nivel mundial el número de casos ya supera los 60 millones de casos y Corea se enfrenta a un nuevo repunte de contagios. Para colmo, la previsión no es optimista, pues se espera que la pandemia empeore con la llegada del invierno en el hemisferio norte.

Según datos sobre coronavirus de Worldometer, sitio web de referencia que proporciona estimaciones y estadísticas en tiempo real sobre diversos temas, hasta el día 24 fueron reportados 60.053.346 casos de COVID-19 en el mundo, desde el primero notificado a la Organización Mundial de la Salud el 31 de diciembre de 2019. En la información que viene mostrando ese sitio es posible ver que, tras alcanzar un total de diez millones en 179 días -desde ese primer caso presentado a la OMS- la propagación del virus se aceleró, y el tiempo en registrar diez millones de contagios se redujo a 44, 38, 32 y 21 días, hasta que el aumento de 50 millones a 60 millones de casos fue en apenas 16 días.

Durante la última semana, en concreto, el promedio diario de nuevos casos fue de unas 590.000 personas, casi 1,5 veces mayor que hace un mes, lo que indica una rápida propagación del virus actualmente. 

Por países, Estados Unidos es el más afectado con 12.930.000 casos, seguido de India, Brasil, Francia y Rusia, mientras que en el mundo once naciones acumulan actualmente más de un millón de infectados. 

Y el volumen de muertes se eleva a 1.410.000 personas a nivel planetario.

En Corea, también se observa un nuevo repunte y el número de casos intradía se disparó hasta 583 el día 26. Dicho volumen supone un aumento de más de 200 casos de COVID-19 respecto al día anterior, así como el primero en superar los 500 en más de ocho meses, desde el 6 de marzo, cuando surgió la primera propagación masiva del coronavirus dentro del país.

El último repunte deriva de contagios grupales en entornos cotidianos, que se dan de una forma dispersa, dificultando la detección del origen y el rastreo de desplazamientos de los infectados, y acelerando los contagios secundarios o terciarios, mucho más que cuando surgió el segundo repunte a partir de casos concretos o actividades determinadas, como las manifestaciones del 15 de agosto.

En base a esto, los expertos sanitarios consideran más importante que nunca respetar estrictamente las pautas de distancia social, al tiempo de estar a favor de reforzarlas. De hecho, los últimos datos no están lejos de satisfacer las condiciones que el Gobierno estableció no hace mucho y pasar del actual Nivel 2 a Nivel 2,5.