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El presidente Moon Jae In declaró el día 22 sobre las vacunas contra COVID-19 que confía en que puedan ser adquiridas y administradas sin retraso, reafirmando la determinación del Gobierno de proceder con diligencia a la compra de dichos fármacos cuatro días después de que las autoridades competentes anticiparan la inminente firma de varios contratos. Concretamente, adelantaron que durante diciembre cerrarán los contratos con Pfizer y Janssen, y en enero con Moderna.

En ocasiones anteriores, el Gobierno surcoreano explicó que planea adquirir tempranamente vacunas desarrolladas por farmacéuticas multinacionales para 44 millones de personas y que las administraría desde febrero o marzo de 2021. Entrando en detalle, especificó que asegurarán dosis para 10 millones de ciudadanos mediante el mecanismo internacional COVAX Facility y para 34 millones de personas más a través de contratos con firmas extranjeras. Con COVAX Facility, Corea del Sur ya estableció un compromiso de compraventa, y el 9 de octubre hizo un pago adelantado de 85.000 millones de wones, mientras que también firmó contratos de compra anticipada o acuerdos para compraventa con cuatro laboratorios, incluyendo los tres anteriormente mencionados y AstraZeneca. En particular, con esta última, cerró exitosamente un contrato a comienzos de diciembre para adquirir vacunas para 10 millones de personas. Asimismo, apenas esta semana, el día 23- estableció contratos con Janssen por 6 millones de vacunas más y Pfizer por otros 10 millones más, que permitirán a Corea vacunar contra COVID-19 a la población. En tanto, con Moderna están en marcha las negociaciones sobre la compra de vacunas para otros 10 millones de personas.

Sobre el calendario de vacunación, la Agencia de Control y Prevención de Enfermedades explicó que coordinará con flexibilidad, considerando la llegada de los medicamentos a Corea, la propagación del coronavirus en el país, la administración de las vacunas en el exterior y la aparición de posibles efectos secundarios. Aclaró, no obstante, que la meta es finalizar la vacunación antes del periodo regular de brote y propagación de la gripe estacional en 2021, concretamente antes de noviembre del próximo año. Eso sí, la administración de las vacunas contra COVID-19 se realizará de modo gradual, priorizando a personas de edad avanzada, pacientes internos en asilos, centros de cuidados especializados y demás residencias colectivas, enfermos crónicos, y personal de servicios sociales básicos, como profesionales y trabajadores médico-sanitarios.