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Hoy les presentaremos una fruta ideal para consumir precisamente en septiembre aquí en Corea del Sur. La protagonista es la pera coreana, también conocida como la pera asiática, que se caracteriza por su jugosa textura, forma casi redonda y piel de color amarillento. Los antepasados solían considerarla como una fruta sagrada, de ahí que hasta hoy día es colocada en el altar en los típicos rituales del culto para ancestros. Esta fruta además es popular aquí en este país asiático por ser sabrosa y dulce, y también por contar con múltiples propiedades beneficiosas para la salud. 

Les cuento que la pera coreana es rica en luteolina que puede ayudar a prevenir gripe, tos, asma y bronquitis. Por tanto, se consume mucho durante los cambios estacionales o en invierno para evitar o aliviar los síntomas del resfríado. También puede ser un excelente aliado para combatir la resaca. Es un alimento alcalino y una de las frutas con mayor cantidad de agua, por tanto ayuda a disminuir la deshidratación tras beber alcohol. Por si fuera poco, contiene abundantes aminoácidos orgánicos y azúcar que alivian la fatiga corporal, además de promover la actividad del hígado y desintoxicar el cuerpo. La pera coreana es también buena fuente de enzimas digestivas, por lo que mejora la función del sistema digestivo. También cabe destacar que se utiliza a menudo en la cocina pues relaja las proteínas de la carne y la ablanda.

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En esta ocasión, quisiera compartir con ustedes la receta de un ponche tradicional elaborado con pera, conocido como “baesuk” en coreano. Es sabroso, nutritivo y bastante sencillo de elaborar, así que les invito a probarlo.

Los ingredientes necesarios para cuatro personas son: dos peras coreanas, un jengibre, cinco cucharas de miel, tres rajas de canela entera y cuatro cucharas de pimientas enteras. Primero, colocamos en una olla el jengibre cortado en juliana, la canela y las pimientas; y luego, agregamos tres tazas de agua. Tapamos y ponemos la olla a hervir a fuego alto hasta que rompa en hervor. Bajamos a fuego medio y proseguimos la cocción durante aproximadamente una hora. Si desean, pueden agregar azufaifas, o también unos 200 mililitros de vino blanco o soju, que es el tradicional aguardiente coreano. Por otro lado, lavamos bien las peras coreanas, las pelamos y las cortamos en láminas de unos 5 centímetros. Es recomendable que el grosor sea de entre 1 o 2 centímetros. Ahora, volvemos a la olla y retiramos todos los ingredientes. A la infusión obtenida, le agregamos las peras cortadas y la miel, y dejamos todo en la olla hirviendo a fuego medio hasta que las peras se pongan transparentes. Y... ¡ya está! Servimos en una taza el ponche caliente con las peras cocidas. Pueden decorarlo con piñón molido.