Cuatro de cada diez surcoreanos tienen planes de posponer su graduación. En un sondeo reciente efectuado por la agencia de colocación de empleo, Saramin, un 43% de los universitarios en su último año, ha afirmado considerar seriamente aplazar su momento de graduación. Por áreas de estudio, contestaron de dicha manera un 52% de alumnos con especialidad en economía y administración de empresas; un 42% de los especializados en ciencias e ingeniería; y otros tantos estudiantes de ciencias sociales.
Tras ser preguntados por el motivo por el que querían prorrogar la recepción de diplomas, dieron respuestas múltiples. Obviamente, casi todas las respuestas estaban relacionadas con el empleo. Una mayoría absoluta contestó que porque no querían graduarse para ser etiquetados como “joven parado” de un día para otro. Otros explicaron que porque las empresas prefieren a candidatos “graduandos”, antes que a
“graduados”. Muchos universitarios posponen su graduación también para obtener méritos valorados por los empleadores, y una buena calificación en exámenes de alto nivel de idiomas extranjeros, para así intentar sobresalir entre la multitud de personas que aspiran a ocupar el mismo puesto que ellos.