La Superintendencia Educacional de Seúl dio a conocer que los alumnos que celebren su graduación de manera desmesurada recibirán amonestaciones graves, ya que considera tal acto como una forma de violencia escolar merecedora de sanción. De cara a la temporada de graduaciones, las autoridades pertinentes reforzarán la orientación sobre seguridad, tanto en recintos escolares como fuera de esos establecimientos, en colaboración con la policía, autoridades autónomas y organizaciones de la sociedad civil locales. La medida tiene por objeto evitar que los estudiantes se involucren voluntaria o involuntariamente, en los rituales de graduación que suelen llevarse a cabo fuera de la escuela. Estos resultan desagradables y hasta violentos para muchos, ya que han pasado de tirar huevos y harina, a destrozar los uniformes y desfilar por las calles en ropa interior.
A partir de este año, tales actos desmedidos serán interrumpidos de inmediato por las autoridades y los involucrados, recibirán las debidas penalizaciones. Todo esto, para que los estudiantes asistan a la ceremonia de graduación con gratitud y esperanza, sin desviarse para tomar la dirección equivocada.