“La vigésimo segunda obra de Hong Sang Soo”

Argumento

En una cafetería ubicada en una zona donde nadie imaginaría que hay un establecimiento de ese tipo, está Areum. Ella tiene encendida su computadora portátil como si fuera a escribir algo, sin embargo presta una mayor atención a conversaciones ajenas, como la que protagonizan un hombre y una mujer que le culpa por la muerte de una amiga en común, la que tienen otra mujer y un viejo actor que le pregunta si no puede alquilarle un cuarto, o la que mantienen una tercera mujer y otro hombre que le propone escribir juntos el guion para una película conviviendo en una pension durante un mes. Aquí Areum es la observadora, que entre esa gente hace dentro de sí reflexiones sobre las conversaciones que escucha a su alrededor, pero a ratos es también la observada por otros que están en el mismo espacio.

Comentario

Llegará un momento en el que al público no le quedará otra que rendirse y reconocer que el cine de Hong Sang Soo, pese a su complicada y tan criticada vida íntima, a estas alturas está por encima de toda crítica. Pues la obra de un genio, al final será vista tal y como es, más allá de cualquier controversia que haya protagonizado su autor a nivel personal y por mucho que refleje la ideología y el estado psicológico de su realizador, la producción tendrá vida propia y será considerada un ente individual por sí sola. Este es justamente el caso de la nueva películas de Hong Sang Soo, titulada Grass, Pasto.

Grass o Pasto es la vigésimo segunda obra de Hong Sang Soo. De una duración de apenas 66 minutos, la cinta es el reflejo de un Hong Sang Soo concentrado, destilado. Parece la compilación de microhistorias sobrantes que el cineasta juntó en una sola película, pequeñas historias que con una actitud contemplativa hablan sobre las relaciones humanas, el amor, la vida y la muerte. Y aquí brillan el talento y el ingenio de Hong Sang Soo que demuestra una vez más que cualquiera puede desarrollar dramáticamente una historia intensa, pero que solo los más grandes maestros son capaces de crear drama a partir de historias que parece insignificantes y triviales.

Grass es de nuevo el típico rompecabezas de Hong Sang Soo, el cual se completa al conectar los pedazos dispersos a lo largo del film. Sin embargo, es mucho más potente que las anteriores producciones de este director. Sobre todo son profundamente convincentes las reflexiones que hace sobre el amor, la muerte y la codicia, así como sobre cómo el mundo puede ser a través de un cigarrillo, una disculpa, un llanto, un arrepentimiento, una confesión, en fin, a través de un diálogo, un lugar mejor.

Durante mucho tiempo, Hong Sang Soo se centró en crear aberturas narrativas descomponiendo la historia de un mismo narrador. Dicho esto, la gran novedad en el estilo de este cineasta, la cual se nota claramente en la película Grass, son los cambios de narradores que hace para contar una historia desde diferentes puntos de vida o para hacer converger varias historias sobre un mismo eje. Otra gran novedad es el uso de la música. Por lo general, en las películas de Hong Sang Soo existía una cierta incongruencia entre la música y la situación exhibida en la pantalla que generaba ironías de lo más atractivas. Sin embargo, en Grass, cada pieza de música -que en el film se dice que fue escogida por el dueño de la cafeteria- encaja de la manera más adecuada al contenido y al ritmo de la conversación a lo largo de la cual suena. Así, el casi único denominador común entre la música de Grass y la de otras obras de Hong Sang Soo es que incluye mayormente composiciones clásicas, como los impromptus de Franz Schubert, los temas de la ópera Lohengrin de Richard Wagner y Orfeo en los infiernos de Jacques Offenbach.

Una bella secuencia de la película Grass es aquélla que muestra el crecimiento del pasto en las macetas colocadas frente a la cafetería, escenario de todos los sucesos en la cinta, como metáfora del ciclo de vida como parte de las leyes de la naturaleza. También es sugerente la posición de Areum, el personaje central del film interpretado por la actriz Kim Min Hee, que se mantiene como observadora de todo pero que en un momento dado se convierte en la observada, mientras que no queda claro si está en efecto husmeando las conversaciones que tienen lugar en ese espacio, o si lo que ve el público es una invención suya.

La existencia y la vida parecen complicadas pero son más simples de lo que uno imagina. La frontera entre lo real y lo irreal se desmorona a cada rato y el ser humano, por mucho que trata de mantenerse firme, es frágil y inestable. Pero, aunque débil y solitario, respira, intentando vivir con energía y encontrar algún significado de su existir, mientras que la vida parece tener doble, triple o múltiple sentido. Pero, todo esto suena irrelevante, cuando el cine de Hong Sang Soo ya no puede ser descrito con palabras, ni tampoco necesita ningún tipo de aporte o agregado escrito. Pues es como explicar una sensación, una forma de vida, una manera de pensar que solo sería posible, no al ver y analizar con la mente una película, sino al sentirla con el corazón.

Director: Hong Sang Soo

Elenco: Kim Min Hee, Jeong Jin Yeong

Género: Drama

Página web: -

Duración: 66 minutos 

Año de estreno: 2018

Apto para mayores de 15 años