Una noche fresca de septiembre reúne a una decena de jóvenes repletos de preocupaciones en la sala de “Alimentar la pasión”, una singular empresa que busca animar a las personas. La consigna del encuentro era ir solo. Desde las siete de la tarde y hasta pasadas las diez de la noche, los jóvenes dieron rienda a sus preocupaciones y problemas sobre los estudios, la personalidad, las relaciones, el trabajo, y un largo etcétera. Al principio les costó abrirse, pero una vez que empezaron, sus ansiedades e insatisfacciones iban perdiendo la gravedad del inicio para hacerse más manejables.



Los organizadores del encuentro son los fundadores de “Alimentarla pasión”, un grupo que se dedica a la creación de contenidos para elevar la moral de la gente. Como directores ejecutivos de la empresa figuran Lee Jae Sun y Pyo Shi Hyung, unos veinteañeros que producen contenidos de automotivación y desarrollo en forma de cuadros con imágenes y frases, que luego dan a conocer en las redes sociales. Como conocen bien lo difícil que es transformarse en adultos, su meta es proveer apoyo, motivación y críticas constructivas a todos aquellos que se sienten perdidos y no saben qué hacer con sus vidas. Los jóvenes agradecen esta mano sincera con asombrosa fidelidad, y quizá por eso la página de Facebook de “Alimentar la pasión” cuenta con más de 450.000 seguidores en solo dos años.

Lee Jae Sun y Pyo Shi Hyung intentan orientar a los jóvenes que han perdido el norte y les animan con frases e imágenes alentadoras. Saben cómo hacerlo, pues hace dos años ellos también padecían ese mismo problema, al no tener metas definidas en la vida. Estos dos compañeros de universidad recuerdan muy bien el 1 de enero de 2014. Habían terminado el servicio militar, debían retomar los estudios y prepararse para conseguir un trabajo, pero estaban totalmente perdidos, pues no sabían qué hacer con sus vidas. Llevados únicamente por la determinación de hacer algo, abrieron una página de Facebook con un post titulado “¿Qué va primero, el dinero o tu sueño personal?”.

Vertieron en Facebook su opinión y aquello que hubieran querido escuchar cuando estaban perdidos. Y para su sorpresa, siempre encontraban datos estadísticos o figuras públicas que sostenían sus afirmaciones. Después de meses de debate y muchas búsquedas en internet, su tercer post dio en el clavo. Trataba de cómo Joanne Rowling comenzó a escribir la serie de Harry Potter. Tras publicarlo, en un solo día recibieron entre 30 y 40.000 “me gusta”. Desde entonces, la respuesta de los seguidores fue explosiva. El primer año no obtuvieron ganancias y sobrevivieron creando contenidos on-line para otras empresas; pero una vez comenzaron a multiplicarse los suscriptores, comenzaron a obtener ingresos y a poder vivir con los contenidos de “Alimentar la pasión”.

Ahora reciben inversiones, tienen oficina propia y hasta han contratado a dos personas. Pero además hacen sus pinitos en el sector editorial, pues diversas empresas les contrataron para hacer reseñas de libros. Los creadores de “Alimentar la pasión” accedieron, pero imponiendo estrictas condiciones: como que el autor de cada libro fuera ejemplo de dedicación apasionada y que el libro contuviera a valores útiles para sus seguidores. En otras palabras, no hacían publicidad de libros sino que compartían contenidos que merecían la pena. Así, de modo indirecto, algunos libros se convirtieron de verdad en best-sellers. “Alimentar la pasión” es un espacio que provee de combustible a la gente con sueños, y potencia el camino personal, haciendo sentir a la persona que va en la dirección correcta. Para crear una atmósfera social donde todos puedan cumplir sus sueños, Lee Jae Sun y Pyo Shin Hyung siguen leyendo libros, entrevistando a personalidades y devanándose los sesos frente a la computadora para crear contenidos que motiven al cambio.