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Faltan menos de dos meses para la inauguración del XVII Campeonato Mundial de Natación en Gwangju, a desarrollarse del 12 al 28 de julio. 

Hace 10 años, concretamente en los JJOO de Verano Beijing 2008, las plusmarcas mundiales de natación se renovaban día tras día en diferentes disciplinas. 

Es que los nadadores usaron trajes de baño hechos al 100% de poliuretano, los cuales comprimen los músculos, aumentan la flotabilidad y agregan propulsión. 

Solo durante el año 2008, se establecieron 108 récords mundiales, mientras que en 2009, precisamente durante los 8 días del Campeonato Mundial de Natación de Roma, batieron 43 plusmarcas mundiales. 

Ante las críticas sobre el llamado “dopaje tecnológico”, la Federación Internacional de Natación prohibió el uso de bañadores de poliuretano desde enero de 2010. Asimismo, prohibió que los bañadores cubrieran por debajo de la rodilla. 

Desde entonces, dejaron de llegar noticias de plusmarcas mundiales hasta que, en el Campeonato Mundial de Natación en Piscina Corta de 2010 en Dubái, la selección china estableció el primer récord mundial en relevo femenino de 800 m y el estadounidense Ryan Lochte (라이언 록티) renovó la plusmarca mundial en natación mixta individual masculina de 400 m, por primera vez tras la prohibición de usar bañadores de poliuretano. Así los récords mundiales en algunas disciplinas se fueron acortando gracias a métodos científicos de entrenamiento y la mejora de la condición física de los nadadores. Sin embargo, todavía bastantes plusmarcas se mantienen al nivel de los años 2008 y 2009 sin romperse, hecho que despierta curiosidad sobre cuántos nuevos récords se establecerán en Gwangju este verano.