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Vietnam se enfrentó a China en un partido de fútbol Sub-22 celebrado en el estadio de Huangshi en China y ganó al gigante asiático por 2 a 0. 

El partido era importante en dos sentidos. Primero, porque clasificaba para el Campeonato Sub-23 de la Confederación Asiática de Fútbol del próximo enero, pues los primeros tres ganadores del certamen asiático clasifican para los Juegos Olímpicos de Verano de Tokio 2020. Segundo, porque era el primer encuentro entre la selección china dirigida por Guus Hiddink y el equipo vietnamita liderado por el surcoreano Park Hang Seo. Y tras este primer duelo quien sonrió fue Park, apodado como el “Hiddink asiático”. Al director técnico del plantel vietnamita le llaman así porque hace casi 20 años entrenaba la selección surcoreana dirigida por el holandés. 

Durante el partido, vietnamitas y chinos mostraron técnicas claramente diferentes. Los primeros preferían priorizar la defensa para, inmediatamente después, lanzar fuertes contraataques. Mientras, los chinos pretendían dominar el campo con pases súper largos y elevados. Pero después de todo, claramente el juego estuvo liderado por los vietnamitas. En el minuto 18 del primer tiempo, los chinos cometieron un error de defensa y los adversarios no perdieron la oportunidad para marcar gol. En tanto, en el minuto 12 de la segunda parte los vietnamitas marcaron un tanto en una situación similar, y así el partido terminó con el triunfo de la selección de Vietnam, dirigida por el surcoreano Park Hang Seo, contra el equipo chino bajo el mando de Hiddink, de quien aprendía el dirigente del equipo vietnamita hace dos décadas.