Itaewon es como una miniatura del mundo, ya que personas de diferentes etnias y culturas están reunidas en un pequeño espacio. Aunque a los extranjeros que están de paseo por Seúl prefieren generalmente visitar lugares en donde poder experimentar la cultura coreana, personalmente creo que Itaewon es un destino que se debe visitar sin falta; porque no solo se caracteriza por ser un barrio multicultural, sino que posee muchos más atractivos.

Al cruzar cualquiera de las cuatro salidas de la estación Itaewon del metro seulita, ya podrán notar que están en una zona diferente al resto de la capital; porque en vez de altos y modernos rascacielos o casas al estilo tradicional coreano, lo que les espera son tiendas con carteles escritos en varios idiomas, no solo los más comunes que se pueden ver fácilmente en las calles urbanas -como inglés, chino o japonés- sino también en español, tailandés, árabe o francés, entre muchos otros. Es aquí donde uno puede experimentar en primera persona las culturas extranjeras y la coreana al mismo tiempo, ya que el barrio ofrece a todos los visitantes la oportunidad de disfrutar de un ambiente muy peculiar. En Itaewon hay mucho para ver, comprar, comer, beber y bailar. O sea, hay mucha diversión y aquí, el tiempo se pasa volando. Pero antes de entrar en detalle sobre todo lo que se puede hacer en el barrio más multicultural de Corea, primer conozcamos un poco su historia. ¿Les parece?



El origen de Itaewon está estrechamente relacionado con la base militar estadounidense, que está localizada en el distrito de Yongsan, muy cerca de Itaewon. Se dice que tras la Guerra de Corea, un centro comercial y de entretenimiento fue creado cerca de la base, para un mayor goce de los oficiales. Y con el paso del tiempo, otros establecimientos fueron abriendo y consecuentemente, atrayendo a muchos coreanos y foráneos, hasta llegar a convertirse hoy en día una de las calles más divertidas y dinámicas de la capital. Sin embargo, hay otros testimonios que indican que el origen de Itaewon se remonta a principios del siglo XX, en plena colonización japonesa. Se dice que en ese entonces, conformaron una comunidad residencial de nipones en Seúl y le pusieron el nombre de Itaewon. En fin, sea como fuere, queda claro que los extranjeros ocupan esta zona desde hace muchas décadas. Y ahora dejemos atrás la historia para comenzar un recorrido por Itaewon, de callejón en callejón.



Es casi imposible aburrirse en Itaewon, siendo ésta una de las zonas más cosmopolitas de Seúl. Cada calle tiene su propia particularidad. Hay una zona con decenas de restaurantes de comidas internacionales, otras con muchas tiendas de muebles y antigüedades, y también está la parte comercial con un sinnúmero de establecimientos, que van desde ropa –de tallas grandes y pieles-, bolsos, accesorios y zapatos, hasta maquillajes y recuerdos de Corea. Cuando nos referimos a la ubicación de Itaewon, muchos tienen como punto de partida el Hotel Hamilton, situado en la salida número 1 de la estación de metro que lleva el mismo nombre. En la calle diagonal a dicho hotel y sus alrededores, están localizados incontables restaurantes de platos de todas partes. Es el lugar perfecto de visita cuando uno quiere una dosis de cultura extranjera, particularmente aquellos foráneos -residentes o turistas- que extrañan su casa, o quieren comparar cuán igual o diferente, son las comidas más representativas de su país con las preparadas aquí en Corea. Desde las gastronomías más populares como la china, japonesa, norteamericana, italiana, francesa, española, tailandesa y mexicana, hasta las más inusuales como griega, austriaca, turca, brasileña, búlgara y árabe, aquí es posible hallarlas todas, además de, por supuesto, comida coreana. Necesitaríamos páginas para describir los mil y un restaurantes en donde pueden saboreas los platos más deliciosos. Por ello, basta solo con que recuerden que en Itaewon pueden encontrar todo lo que desean comer, sin importar su origen.



Para quienes quieren una recomendación, personalmente este barrio cuenta con muy buenos restaurantes de comida italiana, griega y mexicana, de los que seguramente saldrán muy satisfechos tras degustar su menú. Como dije, además de ser un paraíso gastronómico, Itaewon también tiene un interesante mercado y una vida nocturna muy activa, además de algunos sitios que vale la pena visitar; como la principal y la primera mezquita islámica de Corea. Pero todo eso… lo dejamos para la próxima edición de Callejeando por Seúl.