Si tuviera que describir el destino de hoy, lo resumiría así: “El monte Bugak, cuna de la historia y cultura de Hangyang”, siendo Hangyang el nombre de la antigua Seúl. El monte Bugkan – o Bugaksan, como lo llaman los coreanos- es una montaña de granito de 342 metros, localizada en el centro-norte de la capital. Está ubicada justo detrás del palacio Gyeongbokgung y muy próxima a la casa presidencial Cheongwadae. Por su cercanía al despacho presidencial y consecuentemente, por cuestiones de seguridad, esta zona rodeada de fortalezas de la dinastía Joseon, estuvo cerrada al público durante 40 años, hasta que abrió nuevamente sus puertas en abril de 2007. Esta restricción de acceso al público permitió que el lugar se llenara de abundante vegetación y conservara bastante bien los rastros históricos del pasado. Con la reciente restauración de caminos alrededor de la montaña, Bughaksan se ha convertido actualmente en uno de los destinos más atractivos a la hora de dar un paseo al aire libre. Hay tres rutas que conforman este camino y a través de sus 18 kilómetros de recorrido, que conectan las cuatro principales puertas de la capital, podrán disfrutar de unas espectaculares vistas panorámicas de la urbe. Quienes desean tener ante sus ojos la vista de toda Seúl, tal como vieron en las fotografías, deben caminar hasta la cima, en donde se ubica el Chotdaebawi, una roca de unos 13 metros en forma de vela situada a unos 400 metros de Sukjeongmun, uno de los puntos en donde comienza la caminata. Y desde ahí se ve mejor que desde ningún otro lugar la sorprendente vista panorámica de la ciudad, incluyendo el palacio Gyeongbokgung.


¡Una cosa muy importante! Para acceder al monte Bugak todos los visitantes deben registrarse en la entrada, presentando algún documento de identidad, como pasaporte o licencia de conducir. De lo contrario no podrán acceder. Recuerden que está muy cerca de la casa presidencial y por tanto, hay un estricto control de seguridad. Esta abierto todos los días a excepción de los lunes, desde las 9 de la mañana hasta las 5 de la tarde, y deben llegar al menos dos horas antes del cierre para poder entrar. El tiempo del recorrido varia dependiendo la ruta que elijan; pero según mi opinión, unas dos horas son más que suficientes para pasear un buen tramo y entrar en contacto con la naturaleza en plena urbe ;y también ver -de cerca y lejos- las obras arquitectónicas tanto del ayer como del Seúl actual. Ahora les cuento cómo llegar. En caso de tomar la línea 4 del metro, deben bajar en la estación Hyehwa y en la salida 1 tomar el autobús número 08. Desde la última parada, deben caminar unos 25 minutos. Si optan por la línea 3 del metro, en la salida 2 de la estación de Anguk, tomen el bus número 02, aunque también tendrán que caminar unos 25 minutos a pie desde la última parada.



Si van al monte Bugak, hay un sitio que deben visitar sin falta. Es el pabellón octogonal Bugak Skyway, localizado en la cresta noreste de la montaña. Desde su creación en 1968 hasta el día de hoy, es una de las rutas para conducir más bellas de la capital. Las carreteras en forma de S están rodeadas de abundante vegetación y al final del camino les guiarán hasta este pabellón octogonal llamado Palgakjeong en coreano, que se construyó al estilo puramente coreano. Si tienen coche, pueden primero hacer un viaje por este pintoresco camino y luego disfrutar de un sabroso café observando una hermosa vista panorámica de Seúl; o bien pueden optar directamente por la segunda opción. Desde aquí, cuando hace buen tiempo, pueden observar de lejos la Torre Namsan, el pico más elevado de la ciudad. Si no van en coche, para llegar a este lugar, en la salida número 3 de la estación Gyeongbokgung pueden tomar cualquiera de estos tres autobuses -1020, 212 o 7022- y bajarse en la parada del Centro de Servicio Comunitario Buamdong.