El barrio de Daehangno, conocido como el Broadway de Seúl, es uno los destinos más concurridos por los jóvenes de la ciudad. En la década de los veinte, en este mismo lugar se establecieron numerosas facultades de la Universidad Nacional de Seúl. Hoy día, el campus de dicha universidad en la zona noreste de la urbe, se ha mudado a la zona suroeste de la ciudad, y solo están en funcionamiento algunos edificios. No obstante, hasta la fecha es uno de los sitios más concurridos por los jóvenes coreanos, dado que en sus alrededores se ubican muchas universidades.


El vecindario es conocido como el Broadway, no solo de Seúl sino de toda Corea, porque en esta zona se ubican numerosos cines y teatros, y porque todas las calles se transforman en escenario para cualquier artista que desee actuar ante el público callejero. Pero además de las instalaciones, lo que posiblemente llame más la atención es que el Parque Marronier es todo un símbolo cultural. Pero pese a llevar nombre de parque, es un espacio cultural, deportivo y artístico. Su denominación se debe a los árboles de la especie Marronier que están por todos sus rincones. Tal vez, su tamaño no muy grande pueda decepcionar a quienes lo visitan por primera vez, pero después dar una vuelta, se darán cuenta que la dimensión no es tan importante; porque está lleno de eventos y funciones que alegran todos los sentidos.


Aunque vale la pena visitar el parque tanto de día como de noche, así como entre semana y fines de semana; personalmente recomiendo hacerlo un viernes o sábado al atardecer o por la noche, porque es cuando más artistas –tanto novatos como veteranos, e incluso a veces famosos de la tele- salen a la calle a reunirse con el público. Aquí es posible ver funciones de todo tipo, de baile, canto, interpretaciones musicales e incluso shows de magia y comedia. En realidad, este lugar es popular porque muchos de los artistas que hoy aparecen en la televisión y son famosos, empezaron su carrera citándose con el público en este parque. Así que también es divertido adivinar si los artistas que están en la calle podrán aparecer o no algún día en la pantalla chica.

Además de un mini estadio para conciertos, en los alrededores del parque hay bancos para el descanso, un pequeño rincón para juegos de niños, una fuente y una cancha de baloncesto, entre otras instalaciones. También hay muchas esculturas y monumentos que decoran el sitio, junto a los numerosos árboles. Después de ver alguna función callejera gratuita, luego pueden dirigirse a los cientos de teatros para ver el género que más le guste los 365 días al año, y a precios muy módicos. En especial, merece la pena ir al teatro, ya que generalmente presentan las obras en un lugar relativamente pequeño, y es una excelente ocasión para ver muy de cerca la actuación del elenco. Asimismo, en los alrededores del parque hay innumerables bares y restaurantes de todo tipo y para todos los gustos. En efecto, es una de las zonas preferidas de los seulitas por las incontables razones mencionadas, así que, si quieren sentir un dinámico ambiente juvenil, el Parque Marronier es el lugar idóneo.


¿Cómo llegar?
Lo más fácil y conveniente es en metro. El parque se ubica justo en la salida 2 de la estación Haehwa de la línea 4 del metro.