Sin duda alguna, algunos destinos imprescindibles a la hora de visitar la capital coreana son los palacios reales como Gyeongbokgung y Deoksoogung, y los mercados tradicionales como Dongdaemun y Namdaemun, así como las zonas comerciales de Myungdong y Gangnam. Todos son lugares que realmente vale la pena conocer. Si bien estos destinos son los más turísticos y emblemáticos, Seúl está formada por cientos de barrios que merece la pena recorrer… Sobre todo, para aquellos que deseen conocer otra cara de Seúl, además de los rascacielos y de la multitud de gente que habita esta urbe.



Justo en medio de los distritos más bulliciosos de la capital, hay un pequeño vecindario que refleja mejor que nada la vida diaria de los coreanos, y es un buen lugar para realizar un viaje al pasado de Corea. Es el barrio de Ahhyeon, conocido por los coreanos como Ahyeondong, repleto de pequeñas casas entre callejones y con una pendiente que, para aquellos que lo visiten por primera vez, podría parecer como si estuvieran haciendo senderismo. Pero una vez que lleguen a la cima, se darán cuenta de que este recorrido agotador vale la pena, porque les espera una gran sorpresa: una hermosa vista panorámica de Seúl tanto de día como de noche, así como las cuatro estaciones del año sin importar las condiciones climáticas. El barrio pone a los pies de los visitantes un hermoso paisaje de la urbe.



Al salir de la estación de metro Ahyeon de la línea 2, lo primero que verán es una zona llena de tiendas de muebles. Hoy en día, hay muchos menos establecimientos que antes, dado que algunos de sus propietarios se mudaron a otras regiones, mientras que otras tiendas cerraron por el aumento de las personas que compran muebles por Internet u otros medios. Pero de todas formas, aún hay numerosas personas, en especial las parejas que están por casarse, que visitan este barrio para decorar su casa. Desde locales de marcas muy famosas y conocidas, hasta otras locales o quizás menos populares, este barrio ofrece muebles para todos los gustos y todos los precios. Tal vez no sea el destino para aquellas personas que buscan productos de alta gama, pero si buscan muebles de precios accesibles, éste es el sitio perfecto. Sin necesidad de hacer compras, solo con ver a través de las vitrinas cómo las salas y los dormitorios están decorados ya alegra la vista, y es más, dan ganas de adornar la casa. Pero como dije, lo que más se caracteriza a este barrio son sus excelentes vistas panorámicas. Muchas viviendas están ubicadas una al lado de la otra en un camino de subida, tal como era la ciudad hace varias décadas atrás. Y desde la cúspide del vecindario podrán tener ante sus ojos, una increíble imagen de todo Seúl que parece una fotografía o una escena de película.



Al otro lado de la zona de muebles, se ubica el mercado con el mismo nombre del barrio. Se dice que antes de la Guerra de Corea, este mercado era inclusive más grande que el de Namdaemun. No es un mercado moderno como el de Dongdaemun con edificios, sino que más bien son puestos temporales, con techos de vinilo, pero eso no quiere decir que sus productos sean peores que otros. Aquí, los visitantes pueden sentir mejor que ningún otro lugar de la ciudad, la vida cotidiana de los coreanos de hace un tiempo atrás. Algunos de los platos infaltables del mercado de Ahyeon es el pollo frito al estilo tradicional y el tofu casero, descrito por muchos como ‘helado caliente’, por su suave sabor.



¿Cómo llegar?
La calle con numerosas tiendas de muebles se encuentra en la salida 2 de la estación Ahyeon. Si desean recorrer primero el mercado, deben elegir la salida número 4.