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El ´K-Travel Bus´ es una opción perfecta para los extranjeros que deseen conocer varias regiones de Corea. Como su nombre indica, se trata de una ruta a bordo de un autobús exclusivo, con guías en diversos idiomas, que incluye comida, alojamiento y varias actividades culturales. El servicio incluye varios paquetes turísticos. Dependiendo de la necesidad de cada viajero, puede elegir tours de dos o cuatro días, para visitar un par de regiones específicas, o elegir el de siete días, que abarca todo el país. Hoy les presentaremos el tour de dos días, concretamente el que nos llevará a la provincia Gyeongsang del Norte, para explorar sus tesoros más importantes. 

El tour comienza en el céntrico barrio Insadong, en Seúl, con rumbo a la aldea folklórica Hahoe, en la ciudad de Andong. La aldea Hahoe es uno de los lugares más visitados de todo el país y allí se puede ver cómo era la vida en la antigua Corea. Desde el siglo XVII hasta la actualidad, este asentamiento histórico ha sido habitado exclusivamente por el clan ¨Pungsan Ryu¨, una importante familia que dio famosos eruditos y altos funcionarios durante la dinastía Joseon. 

La aldea constituye en su totalidad un auténtico museo arquitectónico, repleto de tesoros y patrimonios culturales. Las casas conservan su estructura original gracias a las montañas, los bosques y el río Nakdonggang, que sirvieron de baluarte contra ataques e invasiones extranjeras a lo largo de la historia. Así, las viviendas de importantes personalidades de la dinastía Joseon continúan intactas, y también las antiguas tradiciones -como los rituales y las danzas de máscaras-, para transportarles en un viaje imaginario a la Corea de hace seis siglos. Asimismo, otro gran atractivo que no deben perderse es el acantilado Buyongdae, al otro lado del río, desde cuya cima se aprecia una vista privilegiada de la aldea, donde el río y el pueblo adoptan una forma similar a una flor de loto flotando en el agua.

El pueblo fue incluido en la lista de Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, y se hizo famoso a partir de la visita de la reina británica Elizabeth II, con ocasión de su cumpleaños en 1999. 

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Tras disfrutar de la comida típica y las joyas de la aldea Hahoe, es hora de visitar Gyeongju, a dos horas en autobús. Ubicada también en la provincia de Gyeongsang del Norte, fue capital del antiguo reino de Silla. Es conocida como la capital cultural del país ya que está repleta de reliquias históricas. El tour por este “museo sin paredes” incluye recorridos por el templo Bulguksa, el palacio Donggung y el estanque Wolji, todos lugares de visita obligada con gran valor histórico y cultural. Conozcamos uno por uno. 

En primer lugar, el templo Bulguksa es uno de los templos más famosos de Corea, por su rica arquitectura y escala para la época, que le hicieron incluso entrar en la lista de Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. Este complejo religioso es original del año 528, aunque no estuvo exento de saqueos e incendios durante la invasión japonesa, por lo que varios de sus edificios tuvieron que ser reconstruidos. En ese monasterio se encuentran varios tesoros nacionales, de entre los que destacan dos pagodas de piedra que sobrevivieron a los incendios. Con 10,4 metros de altura, se erigen al este y al oeste respectivamente. La primera, Seokgatap, es el arquetipo de la pagoda de piedra coreana; mientras que Dabotap es la pagoda octogonal representada en las monedas de 10 wones. 

Además, podemos encontrar el palacio Donggung y el estanque Wolji, que también son enclaves destacados de Gyeongju. El palacio Donggung era el lugar de residencia del príncipe heredero del reino de Silla, y Wolji es un estanque artificial sobre el que se aposenta el palacio. El conjunto ofrece una vista espectacular, y más de noche, donde los reflejos de los tejados dibujan un paisaje mágico sobre el agua, en armonía con la tenue luz de la luna. Sin duda, un remanso de paz que invita a la relajación y la contemplación.