Científicos coreanos han hecho posible realizar el diagnóstico preliminar del cáncer con sólo unas cuantas gotas de sangre.

El sistema que permite tal operación es el chip y el lector con biosensores semiconductores desarrollados por el ETRI, Instituto de Investigación Electrónica y de Telecomunicaciones de Corea.

Dichos dispositivos son capaces de detectar el brote de una enfermedad en el organismo humano y mostrar su evolución mediante el análisis de los componentes sanguíneos. Entre las dolencias que pueden ser diagnosticadas con este novedoso sistema se incluyen diferentes tipos de cáncer como de pulmón, próstata e intestino grueso.

Para el desarrollo de estos aparatos el ETRI se basa en la teoría de la concentración de proteínas en el suero que aumenta cuando uno adquiere cáncer.

Este sistema de diagnóstico preliminar supone una revolución a nivel mundial, ya que detecta los factores de las enfermedades por métodos eléctricos sin diluir el suero sanguíneo.

Hasta antes de esta tecnología, el suero debía ser diluido en caso de recurrir a la aplicación de biosensores. Esto se hacía a fin de evitar la interferencia de señales provocadas por sustancias como la sal en esa parte acuosa de la sangre.