Un reciente estudio ha revelado que los fumadores, corren un riesgo casi tres veces mayor que los no fumadores, de padecer una hemorragia cerebral mortal.
Este análisis, realizado por un equipo de investigación del Hospital de la Universidad Nacional de Seúl entre 426 pacientes, concluye que los fumadores son 2,8 veces más propensos que los no fumadores, a sufrir una hemorragia subaracnoidea, cuyo índice de mortalidad llega al 50%.
Los investigadores del equipo médico en cuestión recomiendan, en este contexto, no fumar o dejar de fumar; dado que este hábito sube la tensión y produce cambios estructurales en los vasos sanguíneos, provocando derrames cerebrales.