Confirman que no se perciben movimientos extraordinarios entre la comunidad diplomática extranjera en Pyongyang, pese a la recomendación ofrecida por las autoridades de Corea del Norte de retirarse.
Una fuente de Seúl comentó al respecto que, todavía no hay diplomáticos que muestren indicios de querer abandonar la capital norcoreana. Estimó que muchos de ellos consideran tal aviso como una estrategia del régimen comunista para intensificar la tensión.
Por lo pronto, el Gobierno surcoreano empezó a hacer un análisis sobre cuáles podrían ser los verdaderos objetivos e intenciones, tras la recomendación emitida por Pyongyang a las embajadas extranjeras, para que retiren su personal.