A un día del inicio de la fiesta de Chusok, la jornada tradicional de acción de gracias por la cosecha, comenzó el embotellamiento en las autopistas por las caravanas de coches que se dirigen a los pueblos natales. Por su parte, muchas escuelas y compañías han entrado en cese de actividades.
Las terminales de autobuses, los aeropuertos y las estaciones de trenes comenzaron a llenarse de gente desde la tarde del día 9. El atasco comenzó también en las principales autopistas y carreteras regionales, situación que se empeoró debido a las fuertes precipitaciones que se abaten sobre la península.
La Corporación Coreana para la Administración de Autopistas puso en práctica el sistema de carril exclusivo para autobuses en las carreteras del país. Se cree que durante estas fiestas, que se extenderán prácticamente hasta el día 14, más de 39 millones de personas se movilizarán a lo largo de la nación.