Los mandatarios de Estados Unidos y Japón, George W. Bush y Junichiro Koizumi, respectivamente, protagonizaron en Tokio el día 17 una reunión cumbre. En la ocasión manifestaron su acuerdo sobre la pacífica resolución de la crisis nuclear norcoreana a través de la mesa de conversación multilateral a seis bandas. Asimismo, Bush y Koizumi expresaron el deseo de proseguir con los esfuerzos para celebrar una segunda ronda de esta mesa de negociaciones.

El presidente estadounidense manifestó que no está en condiciones de aceptar un tratado de no-agresión, tal como viene pidiendo Pyongyang. No obstante, se comprometió a revisar las medidas para atenuar la preocupación norcoreana sobre su integridad.