Corea del Sur ha realizado con éxito una prueba de un resonador de cuarto de onda para cuadripolo de radiofrecuencia, un elemento clave del acelerador de iones pesados -llamado Raon- actualmente en desarrollo y cuya construcción finalizará en 2021. Así, el país ha convertido en el octavo del mundo en probar y operar un equipamiento de este tipo.
El resonador en cuestión se compone de un tubo acelerador de niobio -un metal que se convierte en superconductor a temperaturas criogénicas-, un sistema de control de energía y un criostato, un dispositivo para mantener la temperatura en niveles muy bajos. Su función prinicipal es acelerar los iones pesados a una velocidad simillar a la de la luz, a unos 300.000 km/seg.
Básicamente, el resonador está diseñado para generar un campo eléctrico de 6 megavoltios por metro, si bien esta vez las pruebas alcanzaron mayor rigidez electroestática, de hasta 7 megavoltios por metro.