En un intento por descubrir el orígen del intenso esmog que afectó a Corea del Sur los últimos días, el Instituto Nacional de Investigación Medioambiental anunció el viernes 8 que, a partir del sábado 9 y durante un mes, realizará un seguimiento atmosférico de 100 horas en total.
Desde 1996 hasta la fecha, dicha entidad ha realizado dicha operación usando un avión pequeño dotado de entre cuatro y cinco equipos de observación, capaz de operar hasta tres horas a una altitud máxima de 5 mil metros.
Sin embargo, a partir de este año usará un avión mediano equipado con hasta 15 dispositivos para observar los estratos inferiores de la atmósfera, para permitir un máximo de 6 horas a 12 mil metros de altura.
Los investigadores intentará averiguarán los principales componentes del esmog y medirán la concentración de los compuestos orgánicos volátiles, así como del amoníaco, principales componentes de las micropartículas.
Las autoridades esperan que los datos obtenidos mediante esta observación, ayuden a mejorar las medidas para reducir el esmog, y también servir como prueba de la procedencia de los micropolvos, de cara a negociar con China al respecto.