Dos aviones rusos con más de 100 personas a bordo se desplomaron casi simultáneamente al sur de Moscú y no habría supervivientes. Las autoridades de Rusia están investigando sobre posibles atentados terroristas que hayan generado la tragedia.
El primer avión con 54 pasajeros y ocho tripulantes a bordo cayó a tierra en la región de Tula, unos 180 kilómetros al sur de Moscú. El segundo avión transportaba a 44 personas cuando cayó cerca de Rostov, unos 165 kilómetros al sur de la capital rusa. Las dos aeronaves eran jets Tupolev Tu-154, el avión de pasajeros de media distancia de uso estándar en Rusia.
El presidente ruso Vladimir Putin dio órdenes al Servicio Federal de Seguridad para investigar el caso y las autoridades de seguridad reforzaron el control de todos los aeropuertos rusos.

La agencia informativa rusa Itar Tass informó, citando palabras de un funcionario de la Oficina de Medidas de Emergencia, que el avión Tupolev –134 con 42 pasajeros abordo partió a las 22.32, hora local, del Aeropuerto Domodédovo pero cayó en la región de Tula a unos 200 Km. al sur de Moscú, en su viaje con destino a Volgogrado. Después, otro avión Tupolev-154 con 46 personas abordo que volaba de Moscú a Sochi, cayó en Rostov del Don.

Las sospechas de los atentados terroristas surgen a raíz de que ambas aeronaves partieron de la misma estación aérea y uno de los aviones envió una alerta de secuestro antes de perder contacto con las pantallas de los radares.