Corea del Norte ha confirmado que el lanzamiento de dos misiles balísticos de corto alcance realizado en la madrugada del jueves 25 fue parte de una prueba de una nueva arma táctica guiada, como advertencia a Corea del Sur. 

La Agencia Central de Noticias de Corea del Norte divulgó el viernes 26 que el líder norcoreano Kim Jong Un supervisó personalmente la prueba de ese nuevo equipamiento desde las proximidades de la ciudad de Wonsan. 

La agencia subraya que el objetivo de los disparos fue enviar una "solemne advertencia" a los "belicistas militares surcoreanos" que despliegan "armas ofensivas ultramodernas" y presionan para realizar un ejercicio militar, desafiando las repetidas advertencias de Pyongyang .

Destacó que, según el mandatario norcoreano, su país se ve obligado a continuar desarrollando armas "súper potentes" para eliminar amenazas potenciales y directas contra la seguridad nacional de Corea del Norte. 

Kim Jong Un criticó que las autoridades surcoreanas "muestran una extraña actitud de doble cara" al ofrecer la mano para la paz ante el mundo, al tiempo que importan nuevas armas y realizan maniobras militares.

En un mensaje aparentemente dirigido al presidente Moon Jae In, la agencia norcoreana destaca que "Corea del Sur no debe cometer el error de ignorar la advertencia de Pyongyang, por muy ofensiva que sea".