Corea del Norte se centra en fabricar productos para combatir el COVID-19, ante una posible prolongación de la actual crisis sanitaria. 

Según informó el diario Rodong el día 11, todas las fábricas textiles de Chongju, en la provincia Pyongan del Norte, han pasado a producir mascarillas sanitarias; mientras que los centros de cuarentena y gestión de salud aumentarán la producción de desinfectantes, para distribuirlos a fábricas, empresas, granjas cooperativas y zonas residenciales.

Asimismo, las fábricas de jabón de Pyongyang se han sumado a la producción de desinfectantes para intentar hacer frente a la situación. 

Las autoridades centran todo su esfuerzo en la prevención del coronavirus, así como en asegurar suficientes equipos y productos sanitarios, y medios de transporte para trasladarlos, de ser preciso. 

Nada más brotar el COVID-19, Corea del Norte activó el sistema nacional de gestión de emergencias y se centró en prevenir la propagación, con medidas preventivas como el cierre de fronteras y la estricta imposición de cuarentena a pacientes con síntomas sospechosos.

Pyongyang hizo especial hincapié en la higiene personal, obligando a usar mascarillas a todos sus ciudadanos. No obstante, de prolongarse la epidemia de COVID-19, podrían tener problemas para autoabastecerse de esos productos.