El presidente del Consejo de Asuntos Estatales de Corea del Norte, Kim Jong Un, manifestó el día 10 que continuará reforzando el potencial de disuasión bélica, no obstante, se comprometió a no abusar de él ni a usarlo de forma preventiva.
Corea del Norte celebró el día 10 en la plaza de Kim Il Song un desfile militar con motivo del 75º aniversario de la fundación del partido de los Trabajadores. El acto tuvo lugar por sorpresa a las 0 horas del día 10, pero fue retransmitido posteriormente, a las 7 de la tarde del sábado por la Televisión Central de Corea del Norte.
Kim Jong Un, vestido con traje, pronunció un discurso de una media hora sobre la importancia de la autodefensa mediante la disuasión bélica, así como a las dificultades que afronta su país ante las sanciones económicas internacionales, el COVID-19 y los desastres naturales. Durante la disertación, en varias ocasiones agradeció a su pueblo el sacficio y contribución al país, y hasta dejó caer lágrimas de emoción.
El máximo líder norcoreano explicó que no fomenta los medios de disuasión bélica contra un objetivo concreto, sino como medida de protección. Aunque no mencionó directamente a EEUU, dio a entender que continuará desarrollando armas para hacer frente a la amenza estadounidense.
Kim también aludió a la pandemia del COVID-19 y deseó a los compatriotas del Sur que superen la crisis, para que, juntos de la mano, puedan alcanzar la cooperación.