Los activistas sospechosos de realizar espionaje y de incumplir la Ley de Seguridad Nacional, actualmente investigados por el Servicio Nacional de Inteligencia y la Policía Nacional, recibieron órdenes de Pyongyang de realizar propaganda sobre Kim Jong Un y ensalzar su régimen mediante artículos o publicidad en diarios locales.
Según Noticias Yonhap, las autoridades policiales y de inteligencia registraron en mayo el domicilio de cuatro activistas con sede en Cheongju, donde confiscaron memorias USB y hallaron cartas de Corea del Norte. En esas cartas, espías norcoreanos ordenaban a los activistas desplegar una campaña propagandística en medios para dar a conocer en la sociedad surcoreana los logros y la grandeza del "presidente", refiriéndose así secretamente a Kim Jong Un. En particular, mediante una carta enviada en noviembre, agentes norcoreanos ordenaban estudiar minuciosamente las técnicas de redacción para que esos textos sonaran objetivos, y usarlas con el objetivo de convencer -sobre todo a los jóvenes surcoreanos- de la grandeza del líder norcoreano.
El Servicio Nacional de Inteligencia estima que hasta junio de 2021 esos activistas publicaron 45 artículos propagandísticos sobre Kim Jong Un en un diario local de Cheongju, y también contactaron con agentes norcoreanos, principalmente en China.
Sin embargo, uno de los sospechosos de espionaje afirma que las acusaciones son infundadas, y alude a "otro caso fabricado por las autoridades del orden", como los muchos que hubo en el pasado. Criticó que solo manipulan datos a su antojo para hacer ver unos debates sobre diferencias ideológicas como un incumplimiento de la Ley de seguridad Nacional.