La rápida propagación de la variante ómicron en Corea del Sur se tradujo en un 92,1% del total de contagios, entre el 30 de enero y el 5 de febrero, 12,1 puntos más que la semana anterior.
Todo el país presenta un "nivel alto" de riesgo en la valoración semanal sobre COVID-19, basada en 20 indicadores como ratio de contagios, tasa de ocupación de camas en salas de cuidados intensivos, número de muertos y promedio de pacientes mayores de 60, entre otros.
El grado de riesgo se divide en cinco niveles: muy bajo, bajo, medio, alto y muy alto. Cada semana, la Agencia de Control y Prevención de Enfermedades anuncia el nivel pertiente.
Las autoridades explican que, si bien el número de pacientes graves se mantiene estable, hay un notable aumento del tratamiento domiciliario, y por tanto requiere mejorar el sistema de tratamiento a distancia y aumentar el número de clínicas de proximidad que se suman a atender pacientes de ómicron.