Tras la elección de Yoon Suk Yeol como 20º presidente de Corea del Sur, varias organizaciones en pro de los derechos de la mujer han expresado su preocupación por la igualdad de género.
Mediante un comunicado, el Centro de Atención para Víctimas de Violencia Sexual de Corea acusó a Yoon de promover el antifeminismo y la misoginia, y de fomentar la discriminación hacia las mujeres y los grupos minoritarios.
Durante la campaña electoral, Yoon prometió suprimir el Ministerio de Igualdad de Género y endurecer las penas por denuncias falsas de violencia sexual.
Según la entidad, con dichas promesas el ex fiscal general anticipa una regresión de Corea en cuanto a igualdad de género, invalidando los esfuerzos institucionales realizados hasta la fecha en pro de los derechos de la mujer.
Así, urgió a Yoon a no concretar una medida que atenta gravemente contra la igualdad, además de limitar los derechos de las víctimas de agresión sexual.
En tanto, la organización Solidaridad Política para las Mujeres de Corea emitió una declaración similar, alegando que si Yoon no reconoce que su estrategia electoral se basó en el odio y la discriminación, la tan mencionada unidad del pueblo quedará en mera retórica.