Bomberos y efectivos anti incendios lograron sofocar los incendios desatados en la costa este del país nueve días después, ayudados por la lluvia que cayó durante el fin de semana, las primeras precipitaciones registradas en dicha zona en un mes.
La lluvia que comenzó temprano en la mañana del domingo 13 favoreció las tareas de extinción, que por los cambiantes vientos y el denso humo negro, que impedía hasta el acercamiento de helicópteros anti incendios no lograban avanzar, mientras los efectivos intentaban evitar que el fuego llegase al monte Eungbong y al bosque de pinos de la zona, el mayor de este tipo en Corea del Sur.
Una vez sofocado el incendio, ahora las autoridades se abocan a ayudar a los habitantes locales y en reparar los daños, incluyendo tareas de restauración forestal e instalación de viviendas modulares para aquellos que se quedaron sin casa.
Aunque no dejaron muertos ni heridos, los recientes incendios de la costa este han marcado un hito en cuanto a duración y pérdidas materiales, pues fueron necesarias 200 horas para extinguirlos y afectaron a unas 24.900 hectáreas de bosque.