Los centros de salud pública y los puestos de diagnóstico ya no realizarán pruebas gratuitas de antígenos, pues las autoridades sanitarias han optado por redirigir esas pruebas a centros privados y destinar esos recursos a reforzar el sistema de atención de COVID-19.
Así, aquellos que precisen hacerse dicho test, tendrán que comprar un kit de autodiagnóstico en las farmacias o acudir a una clinica o consultorio medico del barrio, designado para pruebas de antígenos, por un precio de 5.000 wones en promedio.
Aquellos que den positivo contarán como "caso confirmado de coronavirus" sin necesidad de PCR posterior, prueba que también seguirá disponible en centros de salud pública y puestos de diagnóstico, donde tendrán prioridad los mayores de sesenta años, tras la indicación de su médico, o aquellos que dieron positivo al test de antígenos.