Varios buques de carga de bandera surcoreana están retenidos en Shanghái ante el estricto confinamiento que las autoridades de esa ciudad china mantienen ante el aumento de casos de COVID-19 en la zona.
La medida persiste desde hace tres semanas, factor que inquieta a las navieras surcoreanas al generar problemas en su operativa, ya de por sí estancada ante el bloqueo total de carreteras y trenes que conectan con el puerto de Shanghái.
La preocupación también aumenta entre las empresas surcoreanas de exportación con sede en dicha localidad, pues el confinamiento ha obligado a cerrar por el momento las plantas de producción, tanto por problemas logísticos como por carencia de repuestos.