En dos años y tres meses Corea del Sur acumula un total de 16.674.045 casos de COVID-19.
El jueves 21 el país detectó 90.867 casos, unos 50 mil menos que los 148 mil reportados el jueves de la semana anterior.
Por regiones, Gyeonggi confirmó 22.620 nuevos positivos, Seúl 15.192, Busan 3.539 y la ciudad de Incheon 4.667 casos.
El 22% de los nuevos contagios se dio entre mayores de 60 años, y un 18,9% entre menores de 18 años.
El total acumulado de muertes se eleva a 21.667 personas, incluyendo las 147 que fallecieron el miércoles, dato que sitúa la mortandad por coronavirus en el país en un 0,13%, mientras que a fecha de hoy 846 pacientes graves están internados.
En cuanto a las camas hospitalarias, las UCIs registran una ocupación del 40,7% a nivel nacional, y 574.083 personas siguen tratamiento domiciliario.
Un 64,4% de la población surcoreana ya ha recibido una tercera dosis de la vacuna y un 1,2% una cuarta dosis de refuerzo.
Al remitir los contagios, y en un intento por volver a la normalidad, el Gobierno surcoreano ha relajado en gran medida las pautas de distancia social, normalizando incluso la organización de festivales con más de 300 participantes.
El comité de transición de poder ha mostrado preocupación por la supresión de medidas, y ha exhortado al Gobierno a mantener el uso obligatorio de mascarillas.
Los expertos prevén una nueva ola de coronavirus entre noviembre y principios del próximo año, que según las previsiones podría dejar entre 700 y 2.700 muertes por COVID-19.