Ante la escalada de precios del petróleo, el Gobierno surcoreano ha decidido elevar la rebaja del impuesto sobre combustibles del actual 30% hasta el 37%. 

El cambio entrará en vigor desde julio y se mantendrá hasta fin de año. Así, la gasolina bajará 57 wones más por litro y el diésel 38 wones más, permitiendo a los ciudadanos reducir el gasto mensual en combustible unos 7.000 wones en promedio.

También reestablecieron el precio límite para ofrecer subvenciones en combustible al sector logístico y de transporte de carga, que pasa de 1.850 a 1.750 wones. Por tanto, si el precio del diésel supera los 1.750 wones, el Gobierno ofrecerá ayudas para cubrir la mitad del gasto en combustible de los transportistas de carga, subvención que llegará a unos 440.000 camiones, 20.000 autobuses y 1.000 buques de carga costeros.

Asimismo, a partir de agosto eliminarán provisionalmente la cuota arancelaria sobre combustible de aviones en vuelos nacionales.