El Ejecutivo suavizará las sanciones penales de leyes económicas o corporativas, además de suprimir los incumplimientos administrativos sin sanción penal. 

El anunció llegó el jueves 14 tras la reunión inaugural del grupo de trabajo sobre Reforma de Sanciones Penales Corporativas, integrado por el Ministerio de Justicia y el Ministerio de Planificación y Finanzas. Como argumento de los cambios, alegaron que unas sanciones excesivas pueden limitar la actividad corporativa, además de restar atractivo a Corea como destino inversor. 

El sector empresarial dio la bienvenida al anuncio y aplaudió la iniciativa del Gobierno al intentar mejorar el ambiente de negocios. 

En cambio, los sindicatos y el sector laboral expresaron un profundo rechazo, y aseguraron que la medida prueba claramente que el dinero está por encima de la ley. Criticaron que pensar que despenalizar sanciones administrativas ayudará a mejorar la economía, es tan absurdo como alegar que al suprimir los controles de alcoholemia aumentarán las ventas de automóviles.