El Festival de Cultura Queer de Seúl tuvo lugar el fin de semana después de tres años en suspenso por la pandemia.
El evento reunió a la comunidad LGBT y a los defensores de la libertad de orientación sexual en la capital surcoreana, que acudieron con banderas y pancartas con arco iris, símbolo de minorías sexuales, bajo el eslogan de la 23ª edición; "Vivamos y avancemos juntos".
Al festival acudieron también representantes diplomáticos de diez países en apoyo a las minorías sexuales, incluido Philip Goldberg, nuevo embajador de Estados Unidos en Corea del Sur.
En paralelo, y frente al lugar de convocatoria del festival, hubo una contramanifestación en rechazo de la homosexualidad y de la Ley Anti-discriminación, que prohíbe cualquier tipo de rechzo por cuestión de género u orientación sexual.