La dependencia de Corea del Sur de China al conseguir recursos clave para baterías de coches, como hidróxido de litio, cobalto y grafito natural ha aumentado.
Según datos de la Asociación Coreana de Comercio Internacional, entre enero y julio de 2022 el país importó 1.748,3 millones de dólares en óxido e hidróxido de litio, de los que un 84,4%, aproximadamente 1.476,4 millones de dólares fueron importaciones procedentes de China. Las naciones de las que Corea importa más cantidad de dichos materiales, después de China, son Chile y Rusia.
Asimismo, las importaciones surcoreanas de cobalto dependen en gran medida de China, pues de ella llegaron en los siete primeros meses de 2022 un volumen equivalente a 127,4 millones de dólares, un 81% del total.
En el caso del grafito natural, el 89,6% de las importaciones de Corea procedió de China.
Los datos indican que en años recientes la dependencia de Corea de China para importar los mencionados recursos mostró un aumento constante y marca en estos momentos tasas superiores al 80%. La situación inquieta, además de ser especialmente alarmante para el sector de vehículos eléctricos ante una nueva ley promulgada en Estados Unidos, que excluye de la lista de beneficiarias de subvenciones a automotrices que usan minerales o repuestos chinos.