En las últimas dos semanas Corea del Sur registró una caída récord de temperatura con un promedio de 4,2ºC bajo cero, el más bajo desde 1973, año en que el país comenzó oficialmente a medir y realizar predicciones climáticas.
En tanto, la cota máxima diaria de nieve reportada el día 23 en Gwangju - con 32,9 centímetros- fue la segunda mayor de la historia.
La Administración de Meteorología explica que la reciente ola de frio y las fuertes nevadas se deben al deshielo ártico, pues si bien las corrientes heladas del Polo Norte suelen quedar estancadas por los fuertes vientos en el hemisferio norte de la Tierra, al agilizarse el deshielo, los vientos fluyen hacia el sur y hacia Asia del Este.
Así, las fuertes nevadas de la costa oeste de Corea del Sur y la isla de Jeju derivan de los nimboestratos generados al aumentar la diferencia de temperatura entre el agua y el aire mientras las corrientes polares atravesaban el Mar Amarillo.
En cuanto a enero, los pronósticos anuncian que mantendrá un promedio inferior al de años anteriores, al menos hasta mitad de mes.