Los responsables de las dos principales federaciones sindicales del país se reunieron en Suiza con el director general de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y le solicitaron emitir un fuerte mensaje al Gobierno surcoreano, al que acusaron de desplegar políticas antilaborales. 

El encuentro entre Yang Kyeung Soo, presidente de la Confederación Coreana de Sindicatos (KCTU), Ryu Ki Seob, secretario general de la Federación Coreana de Sindicatos (FKTU), y Gilbert Houngbo, director de la OIT, tuvo lugar en Ginebra en paralelo a la 111ª Conferencia Anual de la entidad.

Yang criticó a la administración de Yoon Suk Yeol por mantener una política laboral hostil y demasiado rígida, afirmando que las relaciones obrero-salariales van a peor en Corea del Sur. Por su parte, Ryu comentó que el Gobierno mantiene una agresiva postura hacia los sindicatos, y aplica doble rasero a sindicatos y patronal. En base a estas críticas, solicitaron a la OIT que enfatice ante Seúl que no reprima a los sindicatos y defienda mejor los derechos de los trabajadores.

Durante la reunión de la OIT los representantes sindicales protagonizaron un fuerte enfrentamiento con la delegación del Gobierno, al recordar el caso de un sindicalista de la construcción investigado por la policía por intentar mejorar las precarias condiciones laborales, pero fue tratado como un maleante y recibió duras sanciones, hasta que finalmente se quemó a lo bonzo.

También censuraron las políticas antilaborales del Gobierno, en particular las reformas unilaterales y al margen del criterio de los trabajadores. 

En respuesta, los delegados del Gobierno refutaron las alegaciones sindicalistas y calificaron sus métodos de protesta de violentos e ilegales.