El creciente número de niños nacidos en hospitales pero cuyos nacimientos no fueron registrados preocupa en Corea del Sur.
El 6 de julio, la Oficina Nacional de Investigación de la Policía confirmó que están investigando 598 casos de "bebés no declarados", de un total de 664 reportados en todo el país.
Por el momento se sabe que 23 de esos bebés fallecieron, ocho casos más respecto al día anterior, y de los casos bajo investigación, 10 se vinculan a posibles delitos.
Un caso particularmente impactante es el de dos bebés que hallaron sin vida en un refrigerador en Suwon, tras confirmar que fueron asesinados por su madre. Dicho caso fue remitido a la fiscalía el 30 de junio.
En tanto, los arrestos de progenitores implicados en estos crímenes también van en aumento. La policía de Yongin detuvo a un hombre presuntamente por asesinar a su hijo - nacido en marzo de 2015- y ocultar el cuerpo.
La policía está enfocando sus esfuerzos en rastrear a esos 540 bebés no registrados oficialmente.