El líder norcoreano Kim Jong Un rindió tributo a los soldados norcoreanos y chinos que perdieron la vida en la Guerra de Corea al conmemorarse el 70 aniversario de la firma del armisticio. 

Según informó la Agencia Central de Noticias de Corea del Norte, Kim acudió el martes 25 al Cementerio de los Mártires de la Guerra de Liberación de la Madre Patria en Pyongyang, acompañado del ministro de Defensa, Kang Sun Nam, y otros altos cagos militares. 

Durante la visita, el líder norcoreano calificó el "milagro del 27 de julio de gran victoria en la historia de la Humanidad", y de indeleble derrota para el imperialismo estadounidense que evitó una nueva guerra mundial. 

Asimismo, Kim visitó el cementerio de los mártires del Ejército de Voluntarios del Pueblo Chino, ubicado en la provincia de Pyongan del Sur, donde destacó la victoria lograda por Corea del Norte y China "a costa de la sangre de los combatientes", victoria que a día de hoy sigue siendo relevante.

Kim acudió acompañado de varios funcionarios de alto rango como su hermana Kim Yo Jong, el secretario para asuntos organizativos del Partido de los Trabajadores de Corea del Norte, Jo Yong Won, o Choe Sun Hui, la ministra de Asuntos Exteriores.

La agencia también confirmó la llegada a Pyongyang de una delegación militar de Rusia, con el ministro de Defensa Serguéi Kuzhuguétovich al frente, para participar conmemorar el aniversario del armisticio.